SITIO DE LISANDRO REYES ARMSTRONG
El sitio del TATA-LICA

4ta Parte: Era Moderna

DESDE: 1912  HASTA: la actualidad        La República Nacionalista y los inicios de la República Popular
Versión: nov 2017
El triunfo de la República sorprendió a los revolucionarios por la rapidez de los acontecimientos. El propio Sun Yatsen, líder de la Liga Revolucionaria de China, formada por estudiantes chinos en Tokio, que estaba en el extranjero recabando apoyos para su causa, tuvo que volver precipitadamente, llegando justo a tiempo para ser nombrado presidente provisional. Pese a que no tenía ninguna preparación para gobernar una república, Yuan Shikai, el último Ministro de la dinastía manchú, que controlaba efectivamente la mitad norte del país, parecía una buena elección para ser nombrado como primer presidente, también provisional, mientras se creaban las instituciones republicanas y se preparaban elecciones.
El Primer Presidente de China
Yuan Shikai presidente desde 1912 hasta su fallecimiento en 1916, era un mandarín que al final de la dinastía manchú, fue Primer Ministro y general que dominaba el norte de China. Lamentablemente usó la presidencia para intentar construir su propia dinastía. Para ello consiguió el apoyo de británicos y americanos, entregándoles la minería del carbón y el petróleo respectivamente. En las elecciones que siguieron, el Partido Nacionalista, heredero de la Liga Revolucionaria China, ganó la mayoría de los escaños al parlamento. Pero su dominio se acaba con el asesinato de su presidente en Shanghai a manos de sicarios de Yuan Shikai. Sin nadie capaz de oponerse a sus designios, Yuan Shikai reformó la Constitución haciendo vitalicio su cargo, disolvió el Parlamento y se deshizo de los líderes rivales. Sun Yatsen fue enviado al exilio.
La aparición de nuevos industriales y actividades comerciales provocan importantes cambios: la eficacia de los terratenientes se deteriora por el mayor rendimiento de los nuevos productores, sus tierras se desvalorizan. La clase media que había aparecido años atrás aumenta y aparecen los primeros proletarios. Los campesinos, que siguen siendo la mayor parte de la población, sufren la opresión de los terratenientes, la pérdida de valor de sus productos, la corrupción de los funcionarios y el daño al agro por el abandono de los trabajos de irrigación.
La Primera Guerra Mundial en Europa desvía la atención internacional sobre China lo que aprovechan Inglaterra para que se reconozca la independencia del Tibet y Japón para extender su expansión colonizadora. Para ello, Japón le declara la guerra a Alemania y los expulsa de la provincia de Shandong quedándose con su control, luego bajo amenaza de intervención armada, exige 21 demandas que Yuan Shikai acepta, manteniendo en secreto el contenido de las más ultrajantes. Japón obtiene el reconocimiento de su ocupación de Shandong y de sus intereses sobre Manchuria, la entrega del mayor conglomerado industrial de la época, el compromiso de no ceder puertos ni bahías a terceros países, así como de emplear asesores militares japoneses y comprarles armas.
Los Señores de la Guerra
A comienzos de 1916, Yuan Shikai preparaba su ascensión al trono imperial pero fallece en junio de ese año. Ante los preparativos imperiales, el gobernador de Yunnan, se proclama independiente y lo siguen los gobernadores de otras ocho provincias. China se desintegra, iniciándose el tiempo conocido como el de los Señores de la Guerra. El surgimiento de los numerosos señores de la guerra que se repartieron China durante las décadas siguientes, son los gobernantes de las provincias desde las que ejercen su poder basados en el poder de las armas. El reparto de poder de las fuerzas locales se solapa con el reparto del territorio: base de campesinos y tierras en las que cultivan opio o las utilizan en proyectos industriales. En unos años China experimenta una atomización sin precedentes, con cientos de entidades políticas semi independientes que se mantienen a base de continuos juegos de alianzas. Es la primera vez en la larga historia de China que el valor militar supera en prestigio al valor intelectual.
En Beijing sigue existiendo, al menos nominalmente, un gobierno central en el que se alternan dos facciones herederas del poder militar de Yuan Shikai, respaldadas por Japón (los señores de la guerra de Manchuria y Fujian) y por Estados Unidos e Inglaterra (los de la cuenca del Yangtze); su poder solo alcanza hasta donde los gobiernos regionales estén dispuestos a acatar sus órdenes. Las guerras entre los señores de la guerra serán continuas, Las clases bajas, principalmente el campesinado, será una vez más el que pague la miseria y sufrimientos de la nueva situación.
Consecuencias indirectas de la Primera Guerra Mundial sobre China
La disminución de la presión colonial, económica y política sobre China durante los años de la Primera Guerra Mundial, permitió alcanzar un buen desarrollo económico. La cantidad de empresas chinas se multiplica y los obreros industriales crecen de 1 a 3 millones durante estos años. En el plano cultural se da un gran cambio al establecerse la escritura en lenguaje ‘baihua’, más fácil y entendida por todos. Surgen sociedades políticas donde se proponen más y más teorías para conseguir la modernización de China. Todas tienen un objetivo común: la abolición de los Tratados Desiguales (producto de las guerras del opio). Algunos incluso plantean que esa “libertad de los pueblos”, mencionada por las fuerzas aliadas en su esfuerzo bélico para vencer a Alemania, también debe de ser aplicada a China al final de la contienda. Con esa esperanza declaran la guerra a Alemania en 1918, aun cuando su participación militar fue menor. Lamentablemente en la conferencia de Versalles (1919), los delegados chinos enviados con el objetivo de ver restablecida su soberanía, ven frustradas sus esperanzas. No solo se mantienen los tratados desiguales, sino que se reconoce la ocupación de Shandong por Japón.
Movimiento del Cuatro de Mayo
En la misma época del fracaso de la delegación china en Versalles se hace público el contenido de las demandas japonesas que Yuan Shikai había accedido en secreto. Esto provoca una ola de protestas por el entreguismo del gobierno, iniciadas en mayo de 1919 por los estudiantes de Beijing en la plaza de Tiananmen , que fue reprimida por la policía, pero que fue replicada por toda China. En cada ciudad los estudiantes protestaron en las calles apoyados con huelgas por los obreros, por los comerciantes y por la naciente pequeña burguesía. Este acontecer fue llamado el Movimiento del Cuatro de Mayo: una crisis política que obliga al gobierno a liberar a los estudiantes, pedirles públicas disculpas y hacer dimitir a los funcionarios implicados. Su importancia radica en que los chinos comienzan a conocer el poder político de la lucha pacífica, la huelga y las manifestaciones. Algunos historiadores ven en esta fecha el inicio de la Revolución China. Por primera vez amplios sectores de la población se muestran unidos para hacer valer sus derechos. Los acontecimientos de estas fechas provocaron un impacto y una reflexión en la vanguardia intelectual de la época, muchos de ellos habían estudiado en el extranjero: parecía que los principios políticos de occidente no eran válidos para China.
Otro hecho caló hondo en los chinos, mientras las potencias europeas humillaban a China en el Tratado de Versalles, la Unión Soviética, apenas establecido su poder en Rusia (1922), renunciaba unilateralmente a los privilegios conseguidos por los tratados desiguales, no así a los territorios conseguidos durante los mismos. Eso llevó a muchos chinos a investigar esa sociedad que había posibilitado el triunfo de una revolución que abolía las diferencias entre ricos y pobres. Se tradujeron al chino sus autores principales, aunque lo que todo el mundo quería saber es como era ese nuevo régimen llamado comunista que había ganado el poder en la Unión Soviética, y cómo se podría aplicar esa experiencia en China.
En unos años el debate intelectual de la época quedó dividido entre los partidarios del marxismo y la revolución, como único medio de recuperar la soberanía perdida, y los pragmáticos, que promulgaban un fortalecimiento del país mediante el estudio de la ciencia, las técnicas occidentales y la aplicación de la democracia.
En 1920 llegó  la primera comisión del Komitern soviético a ayudar a organizar el Partico Comunista en China (PCCh), cuya fundación se concretó por los líderes Li Dazaho  y Chen Duxiu en Shanghai en 1921.
Nota: Komitern era el nombre en ruso de la “III Internacional Comunista”, una organización fundada en 1919 por Lenin, que tenía como objetivo la unión de los partidos comunistas de los países.
Las primeras acciones del PCCh, mediante importantes huelgas que fueron violentamente reprimidas, mejoraron las condiciones laborales del creciente proletariado chino, que tenía deplorables condiciones de trabajo, donde debían trabajar todos los miembros de la familia, incluso los niños, para subsistir.
La ascensión del Partido Nacionalista  y la administración de Chiang Kaishek (1928 – 1949)
Propiciada por Sun Yatsen, quién era partidario de la revolución, en 1924 se inicia, con sede en Cantón, una alianza entre nacionalistas y comunistas con la que intentan conquistar para la causa de soberanía política de China y la expulsión de los extranjeros, al resto del país. Con la asesoría soviética se funda la Academia Militar de Whampoa, de la que Chiang Kaishek es director, y Zhu Enlai, vicedirector político. Con ella se crea el ejército nacionalista por lo que Cantón consigue poder para desafiar al gobierno de Beijing. A la muerte de Sun Yatsen, el poder del Partido Nacionalista pasa a manos de Chiang Kaishek, quién representa más a la alta burguesía que a los intereses nacionales. Bajo su mando se inicia la expedición al norte con los ejércitos nacionalistas y comunistas unidos. Toman Hankou, que convierten en su capital, luego avanzan por el Yangtze  y toman Nanjing. Los obreros de Shanghai se levantan. Más de 800.000 personas participan en las movilizaciones esperando a las fuerzas liberadoras de Chiang Kaishek. Sin embargo, cuando éstas entran a Shanghai el 12 de abril de 1927, abren fuego indiscriminadamente contra los obreros que les reciben. Más de cinco mil dirigentes sindicales son asesinados. Enseguida se inicia una sanguinaria represión. Represión que los soldados nacionalistas repiten masacrando a los obreros en Nanjing y Cantón. Cientos de tiradores de rickshaws o velocípedos fueron asesinados por el único crimen de haber formado un sindicato, las chicas con el peinado a la moda occidental fueron ejecutadas. A ellos siguieron obreros, campesinos, estudiantes, intelectuales y comunistas. En total, durante los dos años de purgas que siguieron al establecimiento del régimen de Chiang Kaishek fueron asesinadas unas 450.000 personas, que llegan al millón en el periodo que alcanza hasta 1937. Los nacionalistas acusaban a los izquierdistas de tratar de convertir a China en un país soviético. Algunos autores consideran que la traición de Chiang Kaishek a sus compañeros de armas comunistas se debió a su reconocimiento por las potencias occidentales como el hombre fuerte de China.
Chiang Kaishek, ambicioso y de carácter contradictorio, aprovechó la ayuda organizativa prestada por los rusos para hacer del Partido Nacionalista un órgano al servicio de sus ambiciones de poder y de gloria personal. Por ser el hombre capaz de dar estabilidad al país, se le reconoce internacionalmente como presidente en el año 1928. Afirmado en el poder, Chiang Kaishek inicia un programa de modernización y recuperación nacional. Consigue recuperar para China el control de las aduanas; reduce las concesiones extranjeras de 33 a 13; las inversiones en educación e infraestructuras van transformando al país; las ciudades se modernizan; su gobierno ha hecho acopio de fuerzas y recuperando muchos de los recursos chinos, aboliendo numerosas capitulaciones. Chiang Kaishek termina de controlar toda China en 1936 en que vence la resistencia de los últimos generales. La segunda esposa de Chiang Kaishek, Meiling Soong, de gran encanto y elegancia, educada en Estados Unidos y con dominio del inglés, tuvo un activo rol como primera dama y diplomática. En Estados Unidos habló en el Congreso y se relacionó con los gobernantes norteamericanos, ayudando decisivamente en conseguir ayuda para el partido político de su esposo en su lucha contra los comunistas.
El progreso experimentado por China es espectacular y abarca todos los aspectos de la vida. Su enfrentamiento con los comunistas le hace mantener un ejército enorme, que se incrementa más aún desde 1931 cuando Japón ocupa Manchuria.
Su punto débil era el total desconocimiento de la realidad rural, donde vive el 90% de la población china, que sigue sometida a la explotación y al poder de los terratenientes como en los tiempos anteriores. Además la corrupción es galopante, las finanzas públicas se despilfarran, el Gobierno se convierte en el principal comerciante de opio, los miembros de unas pocas familias, comenzando con la del propio Chiang Kaishek, copan los puestos de la Administración e, inexorablemente, se sitúan en el medio de cualquier transacción económica de importancia. Para conseguir sus fines Chiang Kaishek incluso utiliza el apoyo de sindicatos criminales y sus jefes, como Du Yusheng, el gánster líder de Shanghai ". (Harry Gelber ). Para los observadores británicos y americanos era cada vez más evidente y frustrante ver que la población en las áreas controladas por los nacionalistas estaba desilusionada del gobierno nacionalista. Los informes de corrupción y brutalidad se multiplicaban, mientras que los comunistas en sus regiones eran cada vez más populares y apoyados. Controlaban un menor territorio, pero eran más organizados y disciplinados que los nacionalistas y tenían fama de ser más honestos y eficientes.
 
Los comunistas
Tras el inicio de la represión en 1927, los comunistas se retiran a la región montañosa de la provincia de Jiangxi donde la ciudad de Yanan pasa a ser su asentamiento principal. Esta huida es conocida como la Larga Marcha, durante ella, los comunistas, siempre perseguidos por los nacionalistas, recorrieron 12.000 kilómetros hacia el norte, pasando por terrenos montañosos, selvas y pantanos. De los 300.000 combatientes y soldados con que contaban, sólo llegaron 30.000 a Yanan. Un contingente del ejército comunista que había participado en la expedición a Beijing se subleva en Nanchang y, venciendo el cerco de los nacionalistas, llega hasta Jiangxi, convirtiéndose en el embrión del Ejército Rojo, que durante los próximos 22 años se mantendrá en guerra continua con el ejército nacionalista.
Durante la heroica travesía hacia Yanan, Mao Zedong se convierte en Secretario General del Partido Comunista. Mao estaba convencido de que el triunfo del comunismo chino no podía basarse en el proletariado de las ciudades, que recién se desarrollaba y era todavía escaso en número, sino en los explotados y empobrecidos campesinos que constituían un 90% de la población del país. Por ello plantea como objetivo reforzar esas bases revolucionarias antes de intentar avances a las ciudades. Siguiendo sus tácticas políticas y militares consiguieron derrotar cuatro campañas militares enviadas desde Nanjing por Chiang Kaishek.  El PCCh, siguiendo las directrices de acción campesina de Mao, logra la victoria quince años después.
Invasión de Japón a China
Comenzó en 1931 con la ocupación de Manchuria, la zona más industrializada y una de las más fértiles y ricas de China. Japón desde su victoria en la Guerra de 1894 por la hegemonía sobre Corea, tenía soberanía sobre la península de Liaodong de Manchuria y había intensificado sus inversiones en la región. Inglaterra y Estados Unidos no intervinieron ni se opusieron a la ocupación; por otra parte les interesaba mantener las abundantes compras de acero y petróleo del creciente imperio Japonés. Los japoneses organizaron la  económica de la región, vinculándola paulatinamente a su propia economía y, para soslayar el control de las otras potencias, establecieron en Manchuria un gobierno títere nominalmente independiente, el Manchukuo, cuyo emperador era el último emperador manchú: Puyi, que se mantuvo hasta el final de la Segunda Guerra Mundial.
Los nacionalistas no hicieron nada para defender las provincias ocupadas, por lo que la resistencia la ejerció el pueblo, nacionalista o comunista, organizado en guerrillas populares que son reprimidas como “bandidos” por el ejército japonés. La Sociedad de Naciones fue incapaz de hacer nada efectivo, salvo organizar un boicot de las exportaciones japonesas.
En 1932 los japoneses atacan Shanghai, bombardean los barrios habitados por la población china, ante la indiferencia de las potencias occidentales y del gobierno de Chiang Kaishek, que sólo se concentraba en perseguir a los comunistas.
En 1936, el gobernador de Manchuria desplazado por los japoneses, al mando de las tropas que debían luchar contra los comunistas en el frente del noroeste, se niega a combatir al Ejército Rojo mientras los japoneses están invadiendo China. Chiang Kaishek en persona viaja para Xian a animarle a combatir, pero es secuestrado y forzado a formar con los comunistas un Frente Único de resistencia a la invasión japonesa, Frente que no fue efectivo por la desconfianza mutua, nunca lucharon unidos contra los japoneses, pero al menos supuso una tregua en la guerra civil, permitiendo a cada bando desarrollar sus estrategias de resistencia contra los japoneses.
Japón inicia su invasión a gran escala en julio de 1937. Con facilidad toman Beijing y ciudades importantes del norte. En Shangai la marina japonesa encuentra fuerte resistencia de los nacionalistas, pero cae dejando cerca de medio millón de victimas chinas. Lo mismo ocurre en Nanjin donde la masacre de civiles incluyendo mujeres, viejos y niños y la violación sistemática, deja cerca de 300 000 víctimas. Más al sur toman Cantón, con lo que consolidan el control de la zona costera de china. Hacia el interior, más montañoso, la resistencia nacionalista y comunista les impide penetrar al interior del país.
La invasión de China por los japoneses no encuentra mayor oposición internacional. Ingleses y americanos, en teoría se declaran neutrales, pero los suministros de petróleo y acero de empresas de Estados Unidos permiten a Japón continuar su esfuerzo bélico en China. Hasta la víspera del ataque a Pearl Harbour los americanos tendrán una participación decisiva en el desarrollo de la armada japonesa.
Los comunistas siguieron con su política de implantación rural, en cuyas zonas, en virtud del acuerdo de Frente Único, no instauran la reforma agraria, contentándose con corregir los abusos más despiadados y modificar los arriendos. De esta forma extienden cada vez más su poder por el campo. Combaten a los japoneses con una guerra de guerrillas en la que cuentan con el apoyo de la población rural, consiguieron aislar a los invasores en el interior de las ciudades. Durante estos primeros años de guerra, la única ayuda que recibieron los chinos procedió de la Unión Soviética. A través del Asia Central, sus convoyes proveyeron tanto al Ejército Rojo como al Nacionalista. Ejércitos tan distintos entre sí como el origen de sus combatientes.
La Segunda Guerra Mundial
En 1939 las continuas hostilidades fronterizas entre los ejércitos ruso y japonés llegan a su punto culminante en la batalla de Khalkhin Gol, donde el general ruso Zhukov que luego se hizo famoso en Europa, derrotó a los japoneses. Batalla que cambia la historia de Asia porque el sueño de los japoneses de colonizar Siberia hasta el lago Baikal, desaparece. En 1941 los japoneses atacan a la marina norteamericana en Pearl Harbour. Las potencias occidentales se percatan que la agresión de Japón les afecta también a ellos y la guerra sinojaponesa se convierte en parte de la Segunda Guerra Mundial. Tras la rendición de Japón en 1945, los americanos les ordenan no rendirse al Ejército Rojo, sino al Ejército Nacionalista.
La Guerra Civil
Tanto el ejército nacionalista como el comunista quedaron, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, más fuertes que nunca. Tras fallidas conversaciones de paz, promovidas por Estados Unidos, la guerra entre ambos estalló en 1946. En 1947 los comunistas al ya no tener los compromisos del Frente Único con los nacionalistas que limitaran sus ideas, comenzaron la reforma agraria. Las tierras de los terratenientes fueron confiscadas y repartidas entre los campesinos, incluyendo a los que prestaban servicio en las tropas nacionalistas, lo que les da un apoyo masivo de los campesinos. Los militares nacionalistas se apoderan de las industrias dejadas por los japoneses. Se produce una corrupción galopante, que empieza por la propia familia de Chiang Kaishek y sus ministros, por lo que pierden el apoyo popular.
En julio de 1947 los comunistas cruzan el río Amarillo hacia el sur, decididos a abandonar la guerra de guerrillas y enfrentarse al ejército nacionalista, armado ahora por Estados Unidos. Los ejércitos nacionalistas les presentan batalla en pocas ocasiones, y cuando lo hacen, están desmoralizados. Regimientos enteros se rinden o se pasan al bando comunista, cuya moral combativa es cada vez más alta. En las marismas del río Huai atrapan a la elite del ejército nacionalistas, más de medio millón, sin posibilidad de victoria.En los comienzos del año 1949 era claro para todo el mundo que los nacionalistas estaban al borde del colapso, regimientos enteros desertaban o se pasaban al bando comunista. Luego de cruzar el Yangtze a lo largo del año 1949, los comunistas toman el control del resto de las regiones de China. Chiang Kaishek, con sus últimos seguidores, huye a Taiwan. El Primero de Octubre de 1949 se funda en Beijing la República Popular China.
 
INICIOS DE LA REPÚBLICA POPULAR CHINA  1949 ACTUALIDAD     
 
Los últimos años de la historia de China, desde la proclamación de la República Popular en 1949 hasta nuestros días, están muy próximos para presentarlos con una perspectiva histórica neutral. Por lo tanto, en este capítulo se ha intentado exponer los hitos más importantes para dar una idea de lo acontecido en los comienzos de la era comunista de China.
Panorama general:
El advenimiento del nuevo sistema, replicó el ciclo de cambios que se venía repitiendo por milenios en la historia de China, es decir antes de cada nueva dinastía hubo un período de desorden y caos, provocado, no sólo por la debilidad de la dinastía que terminaba, sino también por invasiones en mayor o menor escala desde el norte y rebeliones étnicas (no todas las etnias que viven en China, son ‘chinas’. La etnia china más grande es la ‘han’). Eso se produjo antes de las dinastías Tang (618–907), Yuan (1279–1368), Ming (1368–1644) y en la Qing (1644–1912). Ahora se volvió a repetir, reafirmando la idea de que la historia de China es cíclica y repetitiva.
El triunfo de la guerra civil fue acogido con júbilo por la mayor parte de la población china. La insistencia marxistamaoísta sobre la unidad de la teoría y la práctica encajaba casi a la perfección en las tradiciones del confucianismo. El régimen de Chiang Kaishek había perdido su respaldo popular por culpa de la corrupción, la inflación y la represión política de los últimos años. Los comunistas, que llegaban bajo la bandera de la unidad nacional y que habían sido capaces, por primera vez en más de un siglo, de constituir un gobierno chino libre de toda injerencia extranjera, despertaban la esperanza de la población.
Por presión de Estados Unidos y sus aliados, Chiang Kaishek y su partido aunque habían sido derrotados, fueron reconocidos y apoyados durante años como el gobierno legítimo de China por la comunidad internacional. Se hablaba de ‘China Nacionalista’, y asentados en Formosa alegaban que todavía estaban librando la guerra civil. Ocuparon el asiento de China en la ONU hasta el año 1971.
China bajo Mao Zhedong (latinizado: Mao Tse Tung), líder desde 1949 hasta su muerte en 1976. (27 años)
Aun cuando Mao ha sido criticado por todas las tendencias políticas, incluso la suya, hay que reconocer sus extraordinarios logros y también sus errores.
* Reunificó al país bajo un gobierno autocrático, con un partido político único: el Partido Comunista, con un único gobernante en la cima del poder, coincidiendo con el estilo de las dinastías que, por milenios venían gobernando a China. Esta puede ser una probable razón por la que el nuevo sistema no fue resistido por la población.
* Replicó el modelo de la Unión Soviética, de donde recibió ayuda económica, técnica y política de su gobernante Stalin. China firmó con la URSS su primer tratado de Amistad, Alianza y Ayuda Mutua con una nación extranjera. Con la ayuda de ese tratado se industrializó al país.
* La Reforma Agraria se inició a mediados de 1950, completándose la distribución de tierra entre los campesinos en apenas dos años. Más de un millón de terratenientes fueron ejecutados durante la reforma agraria, otros fueron encarcelados hasta ser ‘reeducados’. Apenas los campesinos recibieron sus títulos de propiedad, se inició el movimiento cooperativista, de gran éxito, destinado a mejorar el rendimiento de la tierra y a evitar la aparición de nuevos terratenientes.
* Se desarrollaron mejoras en la vida de las aldeas en servicios de sanidad, educación y ayuda mutua.
* Se persiguió el consumo de opio y la prostitución.
* En pocos meses se logró contener la inflación.
* De enorme importancia fue la imposición obligatoria de un solo idioma, el mandarín, en todo el país y el chino “pinyin” para simplificar la escritura y el aprendizaje del idioma; ello contribuyó a la erradicación del analfabetismo: la tasa de alfabetización subió de 15% en 1949 a un 80% a mediados de los años 1970.
* La Ley de Matrimonio de 1950 estipuló el matrimonio por consentimiento mutuo, el derecho al divorcio y prohibió la compraventa de niños y el infanticidio. Se prohibió la costumbre de vendar los pies de las niñas y los matrimonios arreglados.
* La esperanza de vida aumentó de 40 a 65 años.
* Se adoptó una nueva bandera para el país, roja con cuatro estrellas.
Integridad territorial: Se inició con la ocupación de la isla de Hainan en 1950. El Tíbet, independiente de facto desde la caída de la dinastía Qing, fue ocupado en octubre de ese mismo año de 1950. Sin embargo, Mao tuvo que ceder a las presiones de Stalin para reconocer la independencia de la República Popular de Mongolia, conocida en China como Mongolia Exterior, y que había sido parte del imperio Qing, la última dinastía china. El único territorio que quedaba fuera del control de la República Popular fue la isla de Formosa (Taiwán), refugio de los nacionalistas de Chiang Kaishek. Mao tenía planificado invadir la isla antes del final de 1950, planes que se frustraron, por la Guerra de Corea.
La guerra de corea (1950 a 1953) Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos y la Unión Soviética acordaron dividir Corea en dos, trazando la frontera en el paralelo 38. El norte quedó a cargo de la Unión Soviética y el sur a cargo de Estados Unidos. Cada superpotencia supervisó en su área respectiva, la constitución de dos nuevos estados que quedaron bajo sus respectivas órbitas. Hubo intentos de reunificación que fracasaron.
En junio de 1950, las tropas norcoreanas cruzaron el paralelo 38 e invadieron a Corea del Sur. La ONU reaccionó aprobando una resolución por la que se autorizaba el envío de una fuerza multinacional para repeler la invasión norcoreana. Paradójicamente, esa resolución pudo aprobarse gracias a la ausencia de la URSS en el Consejo de Seguridad de la ONU, debido al boicot soviético a las Naciones Unidas, motivado por la presencia de la República Nacionalista China de Chiang Kaishek en ese organismo.
Estados Unidos, ordenó a la Séptima Flota de la marina que se situara en el estrecho de Formosa para impedir la esperada invasión del Ejército Popular de Liberación chino a Taiwán.
China envió ayuda militar a Corea del Norte, nominada “de voluntarios” porque no quería aparecer atacando a los Estados Unidos, principal fuerza atacante. La entrada en el conflicto del Ejército Popular de Liberación chino, repelió el avance de las fuerzas de USA y los hizo retroceder hasta el paralelo 38. La guerra finalizó con una tregua firmada en julio de 1953. China logró salvar al régimen norcoreano, lo que indudablemente les dio prestigio, pero la situación volvía a ser idéntica a la anterior del comienzo del conflicto. El precio en vidas humanas fue altísimo para China. Aunque no se conocen las cifras, se estima que cerca de un millón de soldados chinos perdieron la vida en Corea, entre ellos el hijo mayor de Mao.
Campañas masivas de movilización social: La Guerra de Corea marcó el desarrollo posterior del nuevo régimen chino y sirvió también para impulsar el espíritu revolucionario característico de la ideología maoísta. Se lanzaron frecuentes campañas masivas de movilización social con carteles propagandísticos y lemas sencillos para inculcar en la población el espíritu de sacrificio necesario para alcanzar los objetivos políticos fijados por el régimen. En esas campañas se persiguió a numerosos ciudadanos extranjeros, en particular occidentales, acusados por lo general de espionaje; en otra se persiguió a pequeños empresarios y propietarios de tierras, acusados de no colaborar con el Partido Comunista; luego vino el Movimiento de los Tres Anti (anticorrupción, antidespilfarro y antiburocracia), orientada a los cuadros del Partido, que se extendió a todo el país, complementado por el Movimiento de los Cinco Anti, dirigida a la burguesía urbana, que pretendía erradicar los sobornos, la evasión fiscal, el robo de la propiedad estatal, el incumplimiento de contratos y la revelación de secretos económicos del Estado.
Como resultado de estas campañas, el Partido Comunista extendió su control sobre los medios productivos y sobre la propia población, que había visto la contundencia de las acciones contra aquéllos que eran calificados de enemigos del pueblo. Estos métodos de propaganda y adoctrinamiento ideológico se usaron también en el Salto Adelante y en la Revolución Cultural.
Primer Plan Quinquenal  (1953-1957) Este plan, similar a los de la Unión Soviética, se basaba en la economía planificada, centrada en la industria pesada y en la producción agrícola y establecía objetivos de crecimiento en la producción agrícola e industrial para los cinco años siguientes. A pesar de los retrasos por la falta experiencia y la falta de conocimientos técnicos de los altos cargos de gobierno, China logró un alto crecimiento económico, superando todas las metas. Durante el Primer Plan Quinquenal, se introdujo el sistema de cooperativas en el mundo rural, que tuvieron un éxito significativo.
En esos años, Mao anunció su decisión de desarrollar armamento nuclear y misiles para ojivas, lo que quedó establecido en el Comité Central del Partido Comunista de 1955; inicialmente recibió ayuda de la Unión Soviética. Asimismo en 1956 se inició un ambicioso programa espacial. (ver Addendum al final)
El movimiento de Las Cien Flores  (1956) cuyo nombre fue tomado de un poema chino, fue un movimiento de poca duración, en que no está claro si con buena o mala intención, Mao decidió oír críticas a sus ideas, de políticos e Intelectuales; pero las críticas fueron subiendo de tono y hubo declaraciones abiertamente anticomunistas y contra su persona, por lo que Mao dio un giro político y lanzó un Movimiento Antiderechista , una de las más violentas campañas maoístas, durante la cual numerosos opositores del régimen fueron ejecutados. De esa forma trágica, terminó el corto experimento con la libertad de expresión y se endureció la censura y el control de la información.
El Gran Salto Adelante  (1958 -1961) El éxito del Primer Plan Quinquenal llevó al gobierno a diseñar un segundo plan quinquenal mucho más ambicioso, que Mao intensificó más todavía e hizo un llamamiento a la movilización total de la población con el fin de aumentar la producción industrial. Esta nueva campaña, conocida como el Gran Salto Adelante, fue uno de los errores de Mao que lo llevó al mayor fracaso económico de la época maoísta.
Para el aumento de la producción industrial se reconvirtieron campesinos como obreros en las nuevas fábricas. La disminución de los campesinos provocó una disminución de la producción de alimentos. Durante el año 1958 se movilizó a la población para acometer los enormes retos de desarrollo industrial señalados por Mao. Se reemplazaron las cooperativas por comunas populares, se incorporó a la mujer al trabajo en el campo y se pretendió masificar la producción de acero provocando un desastre de acero inservible. El Gran Salto Adelante tuvo profundos efectos sociales al separar a numerosas familias, alterando el modo de vida tradicional del medio rural.
Las consecuencias de este ambicioso proyecto fueron nefastas. Las expectativas de crecimiento irreales hacían que los funcionarios  del partido falsearan las cifras de producción para no perder sus puestos, empeorando el problema. Al desastre económico en la política industrial se unió el fracaso del proyecto de las comunas en el mundo rural. A los defectos del sistema se sumaron desastres naturales, sequía e inundaciones, que afectaron a China en aquellos años. Todo esto provocó una gran hambruna; aunque hay discrepancias en los estudios, se estima en alrededor de 30 millones las muertes debidas a la hambruna.
El desastre del Gran Salto Adelante provocó el descontento de los dirigentes del partido y su cancelación en el Comité Permanente del Buró Político de 1958. En aquel comité, Mao abandonó la jefatura del Estado, pero permaneció como Presidente del Partido y, como referente ideológico máximo, apenas fue objeto de críticas.
En las discusiones de esa época ya había objeciones al modelo soviético y por otra parte, el líder soviético Jrushchov se había mostrado crítico con el Gran Salto Adelante y con las operaciones militares de China, que había sometido a bombardeos a islas controladas por el régimen nacionalista de Taiwán. La tensión entre los dos grandes regímenes comunistas aumentó y desembocó en un conflicto abierto en los años que siguieron.
Ruptura con la URSS (1960) Ya en 1956, las críticas del nuevo líder soviético Nikita Jrushchov a las políticas del fallecido Stalin y la introducción de cambios en la manera de gobernar la Unión Soviética, provocó un desconcierto entre los dirigentes comunistas chinos, que debatían el camino que debía seguir el régimen chino. Las críticas a Stalin eran consideradas si no una traición, un revisionismo peligroso e indeseable. Una de las diferencia ideológicas era que, el comunismo de Mao otorgó un papel central a la clase campesina como motor de la revolución, planteamiento que difiere de la visión tradicional marxista-leninista de la Unión Soviética, que veía a los campesinos como una clase con escasa capacidad de movilización y adjudicaba a los trabajadores urbanos el papel central en la lucha de clases. Tras el fracaso del Gran Salto Adelante, en 1960, la Unión Soviética retiró a su personal técnico y canceló los proyectos de cooperación entre los dos países. La República Popular se quedaba aislada, sin apoyos en occidente ni tampoco en el bloque soviético. Al enfrentamiento ideológico entre los dos regímenes comunistas, se sumaron disputas territoriales: con la India en 1959, con los rusos en Manchuria en 1969 y la insurrección armada en el Tíbet en 1959 (que culminó con la huida del Dalai Lama a la India).
Frente a todos estos problemas, Mao Zedong, no estaba contento con el papel marginal al que había sido relegado y, apoyado por su fiel seguidor Lin Biao, lanzó una nueva campaña de movilización ideológica con el fin de recuperar el poder: La Gran Revolución Cultural Proletaria.
La Revolución Cultural, (1966 al 1976) Otro de los errores de Mao. Fue una campaña dirigida contra altos cargos del partido e intelectuales a los que Mao y sus seguidores acusaron de traicionar los ideales revolucionarios por ser partidarios del camino capitalista. Apoyado por un sector dirigente del Partido (Banda de los Cuatro), se creó una enorme movilización estudiantil (Guardias Rojos) para desacreditar al ala derecha, procapitalista, encabezada por Liu Shaoqi, Peng Zhen y Deng Xiaoping. Abarcó todo el país, afectando también a las zonas rurales, se extendió a la clase obrera y a los soldados del Ejército Popular, convirtiéndose en un cuestionamiento generalizado contra las autoridades del Partido. Mao fue apoyado por su esposa Jiang Qing, de gran influencia intelectual y por el jefe del ejército Lin Biao. Lin Biao se encargó de recopilar los discursos más importantes de Mao en un libro, las ‘Citas del Presidente Mao’ o el ‘Libro Rojo de Mao’, que se convertiría en obra de referencia y de lectura obligada para la población en general y en especial, para el Ejército. El objetivo era apartar del poder político a Liu Shaoqi, jefe del Estado, y a Deng Xiaoping, Secretario General del Partido ambos de la línea rupturista de PCCh. La Revolución Cultural no fue resistida por la población, probablemente, debido al descontento con la creciente corrupción y elitismo de los dirigentes.
La Revolución Cultural permitió a Mao recuperar el poder político, pero la lucha por el poder dio lugar a una situación de caos y conmoción política y episodios de violencia, en su mayoría protagonizados por los Guardias Rojos, grupos de jóvenes, apenas adolescentes en muchos casos, que, organizados en comités revolucionarios, atacaban a todos aquellos que habían sido acusados de deslealtad política al régimen y a la figura y el pensamiento de Mao Zedong. Las purgas llevaron a la marginación cerca de tres millones de miembros del Partido Comunista, destruyendo el entramado organizativo del Partido y del Estado. Los intelectuales fueron también víctimas de las purgas de la Revolución Cultural, que condenaron al ostracismo a la mayor parte de los escritores y artistas. Los Guardias Rojos fueron los responsables de los peores excesos de la Revolución Cultural, en forma de actos violentos y de campañas de destrucción de obras de arte antiguas que consideraban representar a la sociedad feudal anterior a la liberación socialista. La situación de caos generada por los Guardias Rojos fue mucho más allá de lo que los dirigentes del Partido, habían llegado a prever y, en enero de 1967, Mao tuvo que ordenar al Ejército que detuviera los desmanes de los Guardias Rojos.
La intervención del Ejército dio paso al ascenso de su jefe: Lin Biao quien se hizo con el control del Partido y se convirtió en el sucesor de Mao, aun cuando Mao recelaba de él. Lin Biao protagonizó dos fallidos golpes de estado, y tras ser descubierto el segundo intento golpista, intentó huir a Moscú en un avión que se estrelló cuando sobrevolaba Mongolia, según la versión oficial, sobre cuya veracidad aún existen dudas.
Si bien la Revolución Cultural en sí, finalizó en el IX Congreso de abril de 1969, las luchas por el poder se extendieron hasta 1976, año en que murió Mao y se arrestó a la Banda de los Cuatro. La Revolución Cultural fue uno de los errores de Mao, que causó mucho daño e influyó en el devenir de China por mucho tiempo. El Partido Comunista ha declarado que la Revolución Cultural fue un error y un desastre para China, pero no ha habido una condena a Mao Zedong.
Apertura al Exterior: A lo largo de los años 1970, se produjo un acercamiento entre la República Popular China y el conjunto de los países occidentales y Japón, debido a dos hechos: por una parte, China había llevado a cabo pruebas nucleares con éxito en 1964 y en 1970 puso en órbita a su primer satélite terrestre; por la otra el enfrentamiento con la Unión Soviética hizo que occidente no considerara a la URSS y a China como un bloque, sino más bien, a China, como un ‘aliado’ contra el bloque de la Unión Soviética y sus países satélites. El primer ministro Zhou Enlai fue el impulsor, hasta su muerte en 1976, de esta nueva política exterior aperturista. En 1971, Estados Unidos levantó su veto a la admisión de la República Popular como miembro de la Organización de las Naciones Unidas, así como la condición de miembro permanente del Consejo de Seguridad. En 1973, Richard Nixon visitó a China y en 1979 se establecieron relaciones diplomáticas entre China y USA.
La muerte de Mao Zedong en 1976 marcó el final de una importante época y abrió dos años de lucha por el poder. Otros dos principales dirigentes del Partido Comunista, Zhou Enlai y Zhu De, murieron también en ese año. Las rivalidades llevaron a Mao a designar, poco antes de su muerte, a un poco conocido, Hua Guofeng, como su sucesor. La encarcelación de la Banda de los Cuatro afirmó a Hua Guofeng en el poder, pero en 1978, Deng Xiaoping reforzó su base de poder y se erigió como nuevo líder máximo del país.
China bajo Deng Xiaoping  (desde 1978  hasta 1997)
En el XI Comité Central del Partido de 1978, Deng quedó como líder supremo de China. Durante ese Congreso, y bajo su dirección se hicieron importantes reformas: se publicó un documento donde se culpaba a Lin Biao y a la Banda de los Cuatro de la Revolución Cultural, de la que se decía que había llevado al caos nacional y resultó una catástrofe para el Partido, el Estado y el Pueblo. El documento atribuía ‘errores graves’ a Mao, pero consideraba que sus méritos como líder revolucionario habían estado muy por encima de sus errores. También en ese congreso, bajo el impulso de Deng, se decretó la apertura al exterior y el comienzo de reformas económicas que cambiaron a China. Se establecieron cinco Zonas Económicas Experimentales en la zona costera, en las que se permitió el establecimiento de empresas extranjeras y el desarrollo de un sistema de producción semejante al capitalista. Las reformas tuvieron un éxito espectacular pero se vieron amenazadas por el fuerte aumento de la población que en esa época sobrepasó los mil millones. Para paliar el problema, se introdujo la política del hijo único, con ciertas limitaciones en el mundo rural.
La estabilidad política permitió a China recuperar las dos colonias que quedaban en su territorio: Hong Kong en 1984 y Macao en 1999.
Bajo la bandera de las cuatro modernizaciones preconizadas por Zhou Enlai (agricultura, industria, defensa nacional, ciencia y tecnología), y asumidas por Deng Xiaoping como eje central de los objetivos de desarrollo, la República Popular China en la década de los años 80 consiguió crecimiento económico y estabilidad política, mientras frenaba el crecimiento de su población y recuperaba las últimas colonias extranjeras en su territorio. Junto a estos éxitos, hubo una mayor libertad de expresión y una mayor apertura a la influencia exterior.
Protestas en la Plaza de Tianamen de 1989: A finales de los años 1980, la incipiente libertad de expresión hizo que empezaran a surgir críticas al régimen, que culminaron en las protestas masivas de 1989, tanto en Pekín como en otras ciudades. La situación internacional en la que las políticas de glásnost y perestroika de la Unión Soviética estaban transformando los regímenes de Europa del Este, amenazaba con extenderse a China, donde aumentaron las críticas públicas a los dirigentes. Por otra parte, las protestas en Tiananmen fueron seguidas por los medios de comunicación de todo el mundo, debido a la gran cantidad de corresponsales que llegaron a Pekín para cubrir la visita de Mijaíl Gorbachov de ese año, visita que suponía la reconciliación de las dos grandes potencias del bloque socialista. La presencia de los manifestantes en la plaza obligó a cancelar los actos oficiales lo que supuso una humillación para el régimen chino a la vista de la televisión de todo el mundo que transmitía lo que ya muchos consideraban la caída del comunismo en China. Todo ello, despertó la ira de Deng Xiaoping y del Buró Político, por lo que se ordenó la intervención del Ejército. No se sabe cuántas personas perdieron la vida en el incidente. Las estimaciones varían desde 400 hasta más de 3000, según la fuente. El resultado fue una condena internacional al régimen chino y fue blanco de fuertes críticas de la opinión pública internacional.
En los años posteriores a 1989, China se enfrentó a una situación de aislamiento internacional y de incertidumbre política. Mientras sufría las sanciones económicas por el incidente de Tiananmen, se produjo la caída de los regímenes del bloque socialista en Europa y en 1991, la Unión Soviética se desintegraba y sus antiguos satélites abandonaron el comunismo, incluyendo la República Popular de Mongolia, territorio antaño reivindicado como chino. Hubo debates entre los líderes y opiniones opuestas, pero Deng Xiaoping se mantuvo firme en detrimento del sector conservador del Partido, seguía creyendo en la necesidad de las reformas económicas, aceleró el ritmo y expandió las exitosas Zonas Económicas Experimentales. Deng pronunció discursos en los que afirmaba que el desarrollo económico, dentro del modelo del "socialismo con características chinas", era la máxima prioridad del Gobierno.
En el XIV Congreso Nacional del Partido Comunista de China de 1992, se abogó por la profundización en las reformas económicas y por la construcción de una "economía socialista de mercado". Este hecho dio lugar a un incremento de las inversiones extranjeras y a un crecimiento económico espectacular. En 1992, el producto interno bruto del país creció un 12%, en 1993 un 14%, y en 1994 de nuevo un 12%. En 1993, Jiang asumió los cargos de presidente de la República Popular y de presidente de la Comisión Militar Central, con lo que consolidaba su ascenso al poder como sucesor de Deng, el cual, ya muy anciano, dejaba las riendas del país a la nueva generación de líderes reformistas. Falleció en febrero de 1997.
China bajo Jiang Zemin  (desde 1992  hasta 2003)
Tras la muerte de Deng Xiaoping y la recuperación de la soberanía sobre Hong Kong y Macao, la economía china continuó su acelerado crecimiento. La crisis financiera asiática de 1997, que asoló al resto de Asia Oriental no afectó a China debido a la fortaleza de su economía. Un gran paso fue la incorporación de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001. Uno de los objetivos para formar parte de la OMC estribaba en asegurarse de un trato igualitario en sus relaciones comerciales con los demás países. Como consecuencia, miles de empresas multinacionales han invertido en China después de entrada a la OMC.
En el plano ideológico, Jiang Zemin enunció su teoría de la Triple Representatividad, según la cual el Partido debía representar a las "fuerzas productivas avanzadas", a la "cultura avanzada de China" y a "los intereses de la mayoría del pueblo". La importancia de esta teoría, que ha sido promovida como parte del acervo ideológico del Partido, junto a los pensamientos de Mao Zedong y de Deng Xiaoping, radica en que, por vez primera, el Partido Comunista abandonó la idea de la lucha de clases y pasó a representar simplemente los intereses económicos y de progreso del país. Es talvez la explicación de porqué el Partido Comunista, a partir de la época de Jiang Zemin, haya aceptado entre sus miembros a empresarios y a hombres de negocios de Hong Kong.
En los últimos años del siglo XX el sistema político chino completó una transición iniciada en la época de Deng Xiaoping, pasando de un modelo de inspiración soviética a un modelo de autoritarismo político combinado con capitalismo económico.
 
Al gobierno de Jiang Zemin, le siguió el de Hu Jintao, desde 2003 hasta 2013 y el actual de Xi Jinping, desde 2013 hasta el presente. Todos han continuado la política de un fuerte gobierno autocrático central, cada vez más lejos de la ortodoxia soviética, y una economía de mercado. Todos han mantenido un muy buen crecimiento económico como para alimentar a su pueblo y también han tenido que lidiar con las dificultades del crecimiento demográfico y el deterioro ambiental.
 
China es hoy la segunda economía del mundo, siguiendo de cerca a EE. UU. y en 2011 ocupó el primer lugar en el mundo, de reserva de divisas. Entre 2003 y 2011, el producto interno bruto del país tuvo un crecimiento anual del 10,7%, en 2005 superó al de Inglaterra y Francia, al de Alemania en 2008 y al de Japón en 2010. Sobresalió en la celebración de los Juegos Olímpicos de Beijing en 2008 y la Expo Mundial de Shanghai en 2010.

Sus mayores dificultades son el crecimiento demográfico, el deterioro ambiental  y las enormes diferencias sociales y económicas entre las ciudades de la zona costera y el interior del país.
 
 
 
 
ADDENDUM
Programa Espacial de China:
Se inició en 1956, en los tiempos de Mao, ha avanzado en forma sostenida y ha alcanzado casi los mismos logros de Estados Unidos, de la Unión Europea y de Rusia. Poco ha trascendido de su desarrollo fuera del país. Además del secretismo del régimen, la barrera del idioma es una evidente dificultad para los occidentales, para obtener información.
Los cohetes chinos se llaman ‘Larga Marcha’, empezaron a ser construidos en 1965. Inicialmente el proyecto contaba con la colaboración de la Unión Soviética, apoyo que fue retirado en 1960, iniciándose el desarrollo con tecnología propia. El primer satélite fue colocado en órbita con el Larga Marcha 1.  Desde 1985 ofrecen servicios comerciales para colocar satélites en órbita hasta de 9,200 kg. Para los proyectos Lunar y Marciano se han desarrollado 15, 20 o más versiones de los cohetes Larga Marcha, con capacidad creciente y suficiente para los dos programas: Lunar y Marciano.
 
1970 primer satélite
2003 primer vuelo tripulado.
2007 – primer orbitador lunar
2008 – primera actividad extra vehicular con un paseo de 15 minutos por el espacio.
2011 se pone en órbita el primer módulo orbital de la estación orbital china.
2012 primera mujer astronauta: Liu Yang.
2013 primer alunizaje no tripulado
 
Estación espacial: Actualmente China mantiene en órbita desde 2011, la estación espacial Tiangong 1. Tres naves chinas ya han visitado este laboratorio espacial, la Shenzhou 8, no tripulada, en 2011; la Shenzhou 9, con tres astronautas, en 2012, y la nave tripulada Shenzhou 10, en junio de 2013.
Proyecto Beidou: China cuenta con su propio sistemas de posicionamiento global (GPS) llamado Beidou.
Proyecto Lunar: Es un programa integrado por exploración robótica y misiones tripuladas. Para la exploración robótica contarán con orbitadores lunares, robots lunares y sondas, que traerán  muestras del suelo lunar a la Tierra. Para las misiones tripuladas tienen intención de utilizar la nave espacial Shenzhou, que será lanzada el cohete Larga Marcha 3A. Está previsto que en 2018 una sonda se pose en la cara oculta de la Luna. En 2013 se realizó con éxito el primer alunizaje no tripulado. Para 2024, China aspira a enviar una misión tripulada a la Luna.
Proyecto Marciano: Para 2020 se prevé lanzar una nave al planeta rojo para estudiar su atmósfera y superficie, previo a una misión tripulada más adelante. La primera misión marciana para China tendrá su despegue entre los meses de julio y agosto 2020 por la distancia entre el Planeta Rojo y la Tierra. La misión, aún sin nombre oficial, consiste en una sonda y un rover que amartice y explore tanto la superficie como la corteza de Marte. Es probable que allá se encuentre con los rover europeo y estadounidense, que están programados para la misma época.
 
Ferrocarriles de Alta Velocidad:
Desde 2008 China cuenta con ferrocarriles de alta velocidad y desde 2016 tiene la red de alta velocidad más grande del mundo, formada por más de 20 000 km, la mitad para trenes de 250 Km/H y la otra mitad para 300Km/H. Además tiene funcionando desde 2004 el primer tren del mundo de levitación magnética de 430 Km/H de 30 km entre Shanghái  y su aeropuerto.
 
Represa de Las Tres Gargantas:
Es una represa situada en el curso del río Yangtsé a orillas de la ciudad de Yichang, en la provincia de Hubei, en el centro de China. Es la planta hidroeléctrica más grande del mundo en extensión y en capacidad instalada: 22 500 MW. La construcción se inició en 1994, en 2003 comenzó a operar el primer grupo de generadores. En 2016, se dio por terminada al inaugurar un ascensor para barcos con un desplazamiento de hasta 3.000 toneladas para que los barcos que navegan por el Yangtsé puedan superar los 113 m del dique. (Antes se hacía con un sistema de 5 esclusas)
La Presa de las Tres Gargantas, ya sugerida por Mao Zedong en los años 50, se planificó para responder a la creciente demanda de energía del delta del Yangtsé y también para reducir o controlar las inundaciones y crecidas del mayor río de Asia.
 
 
 
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis